Algunos se preguntarán, ¿cómo así? ¿Cómo es lo mismo hacer un Ironman que ser un emprendedor? Pues siendo una persona que hizo un Ironman 70.3 y es dueña de su propio negocio, te puedo decir que sí, es la misma cosa.
Hace poco cumplí una meta que me propuse el año pasado: hacer el Ironman 70.3 de Panamá. Para quienes no saben, un Ironman es una competencia de triatlón donde, por lo menos en el 70.3, se nadan 1.9km, se monta en bicicleta por 90km y se termina con 21km corriendo ¡Toda una experiencia!
Ahora, ¿por qué digo que es lo mismo? A continuación, les doy 8 motivos:
1. Para llegar a la meta hay que ser consistente y eso no es fácil
No creo que exista una persona que pueda hacer un Ironman bien, entrenando a veces o cuando sientes que quieres entrenar. Nadie dice todos los días “uuuyy qué rico, son las 4:00am vamos a entrenar”. Pero si te propones esa meta, sabes que debes cumplir contigo mismo para lograrlo, cuando tengas ganas y cuando no.
Es lo mismo cuando eres dueño de empresa, no puedes esperar que tu negocio prospere si solo estás a medio tiempo y si solo haces las cosas que te gustan. Ser emprendedor, por lo menos al inicio, significa que vas a lidiar tanto con lo que te encanta como con lo que no. Lo importante es estar presente, y hacer las cosas que te gustan y las que no tanto, para avanzar.
2. ¿Se necesita asesoría?
No siento que sea obligatorio tener a un entrenador para hacer un Ironman. Sin embargo, cómo ayuda y muy probablemente llegues a esa meta mejor y más rápido que si lo haces solo. Obviamente, para tener asesoría se requiere de recursos, pero si los tienes, no lo pienses, hay personas que son expertas y tienen más experiencia en el tema que tú. Siempre es una buena inversión en mi caso, no lo dudé y me inscribí desde un inicio en Elite Training Team.
Es lo mismo en tu empresa, una vez tu negocio comienza a generar ingresos, a veces es difícil tomar la decisión de invertir, ya que da miedo equivocarse y sentir que desperdiciaste el dinero (I know, I’ve been there). Pero adivina, no puedes ser experto en todo, YouTube es un buen guía, pero hay personas que ya saben de tecnología, finanzas, contabilidad, mercadeo, redes sociales, no inventes la rueda y mucho menos abarcarlo todo, te vas a abrumar. Invierte en conocimiento, asesórate, y tú enfócate en lo que hace crecer a tu negocio. No todas las inversiones serán buenas, pero invertir te ayudará a llegar más lejos más rápido, solo hazlo sabiamente.
3. Es muy fácil gastarse el dinero en lo que no es
Siguiendo el punto anterior, sí, invierte en asesoría, equipos, recursos, pero hazlo sabiamente.
En el deporte a veces uno se deja llevar por la idea de que la mejor bici, el último modelo de zapatillas o el mejor reloj, te dará mejores resultados. Puede que eso sea real ya cuando estas a un nivel muy top. Pero iniciando, pon los pies en la tierra, porque en lo que más debes invertir es en ti mismo.
¿Y cómo no va a ser eso realidad en los negocios? Donde quieren la última computadora para usar word, los mejores pisos, el mejor escritorio, pero no se invierte en el recurso humano que es precisamente el que mueve tu empresa.
Hay que enfocarse e invertir el dinero donde debes, cuidadosamente.
4. Tienes que tener un objetivo
Puedes entrenar sin tener una meta, sí. Solo que si deseas lograr algo (ya sea una competencia, mejor salud, un mejor tiempo), necesitas ponerte una meta medible.
Es lo mismo con tu negocio, no es solo decir hagamos dinero. Si quieres ser eficiente, debes tener un objetivo claro que puedas transmitir a tus colaboradores para que todos remen hacia la misma dirección y lleguen más rápido a donde quieres llegar.
En ambos casos, puede ser que ese objetivo de miedo, nadie dijo que trazarse metas deba ser una tarea cómoda. Si quieres crecer, a veces toca salir de la zona de confort.
5. Hay veces que, para llegar a la meta, hay que ir lento
Nadie dijo que tienes que ir rápido ni ser el primero. Esa presión te la pones tú mismo y si lo quieres, muy bien, a trabajar por ello.
Sin embargo, no vivimos en un mundo de café instantáneo, llegar a las metas puede tomar meses e inclusive hasta años. Pero es mejor ir lento, que nunca llegar. Ir lento te da la oportunidad de ser consistente y no abrumarte en ese camino hacia lo que quieres lograr.
Recuerda que ni el Ironman ni la vida de emprendedor son un sprint. Ambos son una carrera de resistencia donde sobrevive el que es consistente, el que aprende de sus errores y el que tiene la fortaleza mental para seguir adelante cuando a veces lo único que quieres es renunciar.
6. Hay veces que no importa la experiencia y la preparación, cosas malas pueden suceder
En esta carrera ví a muchos atletas pasarla mal en la competencia (el clima de Panamá está HOT) y yo fui testigo de la preparación y consistencia que tuvieron. Entonces, a veces, no importa qué tan preparado estés, hay cosas que se salen de tu control y después de todo, si hay un pequeño factor de suerte.
Es lo mismo en tu empresa, hay veces que puedes hacer todo bien y, aun así, las cosas pueden salir mal. En esto lo que hay que aprender es a aceptar que no todo está en nuestro control y que siempre existirá un mañana para mejorar. Puede que hoy salga algo mal, pero como dice Karol G, mañana será más bonito.
7. La satisfacción de llegar a la meta es, INCREIBLE
¿Saben lo maravilloso que es cruzar por esa meta luego de meses de entrenamiento? Es una sensación indescriptible. Por supuesto, que luego de llegar uno puede pensar en cosas que se pueden mejorar, pero ese momento es mágico. Al igual que el momento en que cierras un proyecto y ves que los clientes mejoran, crecen, aprenden y dices: ¡fui parte de eso! Cada vez que se cumple una meta en tu negocio es motivo de celebración, de sentirte satisfecho porque lograste algo.
8. Llegar a la meta es tan solo el inicio de la siguiente.
Yo no sé cómo son los demás, pero en mi equipo, no habíamos terminado de cruzar la meta cuando ya se estaba hablando de la siguiente carrera y ahí es donde se nota que hay pasión por el deporte.
Es lo mismo en tu empresa, hay que disfrutar alcanzar una meta y al mismo tiempo no olvidar que vivimos en un mundo de constante movimiento por lo que, si deseamos crecer, es importante seguir trazando nuevas metas y objetivos.
¡Como ven es casi lo mismo! Al final se requiere tener la misma mentalidad para ambos ya que como dije, es una carrera de resistencia, no necesariamente de velocidad.
Ninguna de las dos trayectorias es una mejora lineal, vamos a tener nuestros días buenos y malos, avanzaremos bastante y por cosas de la vida daremos dos pasos atrás. Lo importante es saber que vamos a estar bien si no dejamos de aprender.
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